De vez en cuando viene bien dar un paseo por el pasado. En los años 60, la revista estadounidense Car & Track grababa algunas de sus pruebas para publicarlas en televisión. Esas pruebas tienen hoy en día un alto valor histórico, comprobar qué impresiones daba a los periodistas un coche fabricado hace 45 años o cómo se comportaba dinámicamente. Cuando la prueba en cuestión es de un Shelby GT500 KR, uno de los mejores muscle car de los años 60, tenemos toda una golosina histórica.
El Shleby GT500 KR era el Mustang preparado por Shleby más potente, hoy en día es el Mustang Super Snake, que se vende con 800 CV de potencia sobre el Mustang GT500 2010. El King of the Road de los años 60 equipaba un motor 428 Cobra Jet (7.0 litros de cilindrada), con 360 CV declarados, que en la realidad solían ser hasta cinco decenas adicionales. Toda la potencia pasaba sin filtros electrónicos o autoblocantes al eje trasero a través de una caja de cambios automática de tres relaciones.
En la prueba de Car & Track, el Shleby acelera de 0 a 96 km/h en 6.2 segundos – nada mal para su peso y caja de cambios – y hace un cuarto de milla de 14.5 segundos. Los periodistas también comentan que el equipo de frenado sufre bastante de fading y que la dinámica general del coche es buena, aunque la suspensión es ligeramente blanda por estar orientado a un público menos radical que otros Shleby. Interesante batería de pruebas que se completa con varios drifts y el sonido del deportivo.
Merece la pena perder casi 7 minutos de tiempo en este vídeo, aunque sólo sea por su valor histórico. Comprobar de primera mano detalles como la escasa visibilidad trasera, el lujoso interior o las entradas laterales de aire siempre es un placer, aunque tendremos que tener un buen nivel de inglés. Los amantes de los clásicos estadounidenses directamente no deberían dejarlo pasar, y tampoco deberían dejar pasar la prueba de mi compañero Iván a un nuevo Shelby GT500.
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