Si hay una competición de resistencia que todo el mundo conoce, pero que sin embargo pocos siguen, esa es las 24 horas de Le Mans. Esta es una competición que ha entrado en plena ebullición desde que en el año 2006 Audi presentaba su prototipo diésel para la categoría LMP1, el R10.
Desde su aparición el Audi R10 se ha demostrado intratable, aplastando a sus rivales en 61 de 77 carreras en las que ha participado. Este año se estrenaba su sucesor, con grandes probabilidades de llevarse otro título para los alemanes, el Audi R15, pero esta historia todavía está por escribirse los días 13 y 14 de junio.
La introducción de motores diésel sin duda cambio la concepción que teníamos de una carrera tan emblemática, pero al fin y al cabo todos los motores que participan actualmente en las 24 horas de Le Mans disponen de un motor de combustión interna para obtener su energía. Aunque esto podría cambiar dentro de poco.
Si bien muchas veces son los coches de calle los que se benefician de los avances realizados en el mundo de la competición, esta vez ha ocurrido lo contrario. Los coches eléctricos empiezan a hacer aparición y la competición de resistencia podría ver el primero en el año 2011 de la mano de GreenGT y su prototipo Twenty-4.
El Twenty-4 dispone de un chasis de fibra de carbono y su carenado está realizado con fibra de vidrio, logrando así un peso total de 859 kg. La potencia la brindan sendos motores eléctricos refrigerados por agua, desarrollando un total de 400 CV. El coche pasa de 0 a 100 en menos de cuatro segundos, con una velocidad punta de 275 km/h, aunque la cifra que brilla con luz propia es el par motor de 2000 Nm, casi el doble que los 1050 Nm del R15.
Paneles solares situados en el techo complementan el aporte energético de las dos baterías de ión-lítio de 30kWh. Para finalizar el conjunto se monta una caja de cambios diferencial patentada por GreenGT.
Además de su entrada en competición para el año 2011 con dos ejemplares, es probable que se fabriquen 22 unidades aptas para la circulación. Aunque si el precio está a la altura del rendimiento, sólo unos pocos se los podrán permitir.
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