Quién ha visto y quién la ve. Fiat ha pasado de estar al borde de la quiebra, asociándose de aquella manera a GM y saliendo de esa unión por miedo a desaparecer, y ahora podría convertirse en un gigante de proporciones impensables. A su toma de un 20% del accionariado de Chrysler de manera inminente y su más que reconocido interés por Opel, nuevos rumores aparecidos en Automotive News avalan la teoría de que la casa italiana también estaría interesada en hacerse con el control de Vauxhall (algo lógico) e incluso Saab (esto es bastante menos esperado, ¿verdad?).
La idea, según AN pasaría por agrupar todas las empresas bajo una única sociedad, cuyo valor la situaría a la altura del grupo VAG, sólo por detrás de Toyota. El cacao de plataformas, motorizaciones y proveedores redundantes sería impresionante los primeros años de andadura del grupo, pero a medida que se actualizaran las gamas de todos ellos los costes se podrían reducir de manera importante. Eso sí, hay que ser conscientes de que agrupar tantas marcas bajo un mismo paraguas dejará fuera de juego a una parte importante de la industria auxiliar, pero de algún lado han de aparecer los recortes para que la operación sea económicamente viable.
Según las especulaciones, la nueva mega-compañía podría ser una realidad a finales de verano. Quedará por ver cómo queda confeccionado el nuevo gigante europeo con tentáculos en el mercado americano, y qué efecto colateral tiene en VAG, PSA y Renault Nissan.
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